miércoles, 8 de octubre de 2014

JOYABAJ QUICHE






MUNICIPIO DE JOYABAJ DEL DEPARTAMENTO DE EL QUICHÉ

Joyabaj (Santa María Joyabaj) es un municipio del departamento de El Quiché Guatemala Fue fundado alrededor del año 1549 como una de las reducciones o "Pueblos de indios". El nombre Joyabaj es probablemente derivado de Xol abaj, que en el idioma Quiché significa 'entre piedras'. Conocido también como la cuna del palo volador por su tradición cultural.
Joyabaj, es una mezcla total de culturas, y se refleja en la belleza de las combinaciones de su traje típico. Es considerado uno de los más bellos del país.
La etimología de Joyabaj se indica en el Popol Vuh y es mencionado como el pueblo de Xol ab‟aj de acuerdo con Jorge Luís Arriola en  idioma K‟iche‟ significa  lugar entre piedras. Según otra versión Xoy significa piedra de talco por lo que el nombre significa “Piedra de Talco”, (Plan Estratégico Participativo, Joyabaj, 2008).
Al establecerse el departamento del Quiché por decreto número 72 del 12 agosto 1872, Joyabaj es mencionado como municipio dentro del mismo. La cabecera, que antes se conocía como Santa María Joyabaj o Santa María Xoyabah, fue elevada a categoría de villa por acuerdo gubernativo del 16 abril 1928. Durante el período indígena se conoció a la actual cabecera como Xoyabah o Chuixoyabah, según aparece en las respectivas crónicas. Dependiente del reino quiché, dichas crónicas recogieron el dato que el lugar fue poblado principalmente por indios quichés enviados por sus señores para radicarse, con el fin de defender el paso cuando los de Rabinal quisieran atacar a Gumarcaaj o Utatlán, capital del reino. Para este efecto, subsistió por mucho tiempo un reducto, que los españoles denominaron castillo.
En la sierra, al norte del municipio, existían las ruinas del sitio arqueológico Samaneb, capital que fuera del señorío de Rabinal Achí, de la casa Ahau Quiché, una de las ramas de la confederación del reino quiché. En ese lugar existe una pequeña laguneta, por lo cual también ha surgido la duda si la etimología de Joyabaj pudiese provenir de la corruptela quiché choy = laguna y abaj = piedra, o bien de xol = entre, y abaj, por ser muy pedregoso el municipio debido a 1a sierra de Chuacús en que está enclavado.
En la Historia General de las Indias Occidentales publicado en 1620 por fray Antonio de Remesal, se lee que por el año 1549, a petición de los padres fundadores del convento de la sierra de Sacapulas, por orden y diligencia del licenciado Pedro Ramírez de Quiñónez "en el pueblo de Santa María Joyabaj se juntaron los mismos que en Santa Cruz del Quiché para guardar aquel paso de los de Rabinal y estaban allí como en frontera, y hoy dura el castillo de los cetinelas, o atalayas, que en su lengua llaman Chuixoyabah". Por su parte, el dominico fray Francisco Ximénez en su Historia de la Provincia de San Vicente de Chiapa y Guatemala, por el año de 1716 al comentar lo escrito por Remesal, anotó que el nombre del citado castillo era Xoyabah.
El fraile irlandés Tomás Gage llegó a Guatemala por septiembre de 1625 procedente de México y después de haber atravesado la sierra Los Cuchumatanes llegó a San Andrés Sajcabajá, donde se preparó para caminar al día siguiente nueve leguas que lo separaban del poblado que él denominó Santa María Zohabaj, para lo cual tuvo que cruzar la montaña que en la actualidad es la sierra de Chuacús: “me dispuse a enfrentarme con esa elevada montaña, y cuando llegué a ella encontré que no era difícil vencerla, como al principio había creído, siendo el camino lleno de vueltas y revueltas. Pero mientras más alto más miedo sentía al ver el río allá abajo, cuyos peñascos eran de asustarse y de hacer temblar al corazón más templado". A instancias del cura de Joyabaj, Gage permaneció allí un día, ya que escribió que la jornada siguiente a San Martín Jilotepeque "era por lo menos de diez leguas". Se refirió a Joyabaj como "el más grande y más hermoso de todos los pueblos que pertenecen al Priorato de Sacapulas; los indios son ricos y hacen de su lana de algodón muchas mantas, tienen abundancia de miel y grandes rebaños de cabras y cabritos, pero ni aquí ni en todos los pueblos atrás hay trigo, sino sólo maíz indígena". Anotó que salió de Joyabaj a las tres de la mañana, acompañándolo los indios con teas encendidas: "A corta distancia del pueblo había unos pasos ásperos del camino, para los cuales en verdad que se necesitaba de luz, pero después llegamos a una planicie que se extendió hasta una legua de la cabaña a medio camino, a la que bajamos por una cuesta muy pendiente.  Casi todo el camino era pendiente y áspero, hasta que llegamos como a dos millas del pueblo; al cual arribamos a mediodía". Por el año de 1690 el capitán don Francisco Antonio de Fuentes y Guzmán anotó en su Recordación Florida que Joyabaj pertenecía al entonces Corregimiento de Tecpán Atitán dentro de la vicaría de Santa Cruz del Quiché: "Mas otros dos lugares desta administración dominicana que decimos, son Tetzacualpa y Joyabah, que yacen situados y metidos más a la parte oriental deste Partido. Su temple es frío y su horizonte claro; el suelo enjuto y sano en todo tiempo como abundante y productivo de todo lo necesario para la vida humana; y en especial las granadas de ambos pueblos, las mejores que se producen en el Reyno. Sus templos de ambos muy bastantes a la numerosidad de feligreses, que son en el de Tetzacualpa ciento y treinta y cuatro vecinos tributarios, que en sus familias llegan al número de quinientos y treinta y seis habitadores.
Pero el de Joyabah no le aventaja si no en poco pueblo y vecindad, puesto que su padrón sólo numera ciento y sesenta tributarios enteros, y a su respecto seiscientos y sesenta en sus familias". Don Manuel de Gregorio y Pinillos informó a la Real Audiencia en relación con la entonces Alcaldía Mayor de Atitán y Tepanatitán, de la cual había sido Alcalde Mayor por los años de 1759 y 1760, 1763 y 1764: "Santa María Joyabah tiene doscientos veinte y seis tributarios, se mantienen y ocupan de lo mismo que los anteriores, y algunos tienen sus trapichillos de rapadura, aunque muy cortos, que apenas les producen para ellos propios". La referencia a los poblados anteriores, es en el sentido que los indígenas se mantenían de sus siembras de maíz y tejer algunos güipiles o huipiles. 
El acucioso arzobispo, doctor don Pedro Cortés y Larraz, escribió su Descripción Geográfico–Moral de la diócesis que visitó entre 1768 a 1770 y que constituye el mejor monumento a la agudeza y crítica, relación paciente y concienzuda de la realidad más íntima de su jurisdicción. En su obra se lee que en 1769 llegó a la Presidencia de Santa María Xoyabah: "Desde el pueblo de La Zacualpa hasta el de Santa María Xoyabah hay tres leguas, rumbo como de entre poniente y norte a entre oriente y sur. El camino tiene sus llanuras y algunas cuestas demasiado violentas, bien que por haberlo perdido los que guiaban, fue preciso bajar una montaña algo violenta y volverla a subir. Luego que se sale de La Zacualpa se cruza un arroyo de no mucho caudal, y a poco se le incorpora el que se pasó antes de entrar en este pueblo, como también otros que bajan de la montaña del norte, de manera que a una legua y media es un río caudaloso; corre de Poniente a oriente y es el que se cruza por puente cuando se sale de Xoyabah.
"El valle que hay desde Azacualpa por donde corre el arroyo, tiene legua y media, o dos de longitud y también tiene como media y una legua de latitud, con muchas aguas que se pueden aprovechar; y parece tan fértil que si se cultivara daría todo género de frutos y podía hacer al pueblo rico, aunque fuera muy numeroso; pero así este valle como otras muchas tierras que hay alrededor del pueblo y muy frondosas, están sin cultivo y cuasi ningún cuidado, contentándose con sembrar solamente algunos maíces, con lo que no puede dejar de ser pueblo muy pobre. El pueblo de Xoyabah, aunque en mucha altura, está puesto en sitio hermoso, frondoso y llano, bastantemente desembarazado, no obstante que tiene contiguos algunos cerros vestidos de árboles, pero elevados y que forman varias vallejas. A la banda del norte tiene una montaña que corre de poniente a oriente; y a la otra parte, rumbo al norte de Xoyabah están los pueblos de Sacabahá, a once leguas, de Cubulco a doce y el de Sacapulas inclinado al poniente a diez y nueve.
"Este pueblo es Presidencia comprendida bajo la canónica de La Zacualpa y en donde habita, como se dijo, el cura propio; no tiene anexo, pero sí muchos trapiches que no se especifican y los sitios siguientes que son los más notables: 1º. hacienda de Chuacorral. 2º.,  hacienda el Portugués. 3º.,  sitio de Saltán, cuyas situaciones y distancias aparecen en el mapa y tabla siguiente: 1. Pueblo de Xoyabah, cabecera. 2. Hacienda de Chuacorral a 1 legua. 3. Hacienda el portugués a 4 leguas. 4. Sitio de Saltán a 7 leguas. No pone el cura con distinción y especificación las familias que hay en estos sitios y todas las pone en el número del pueblo. En esta parroquia hay familias 416 con 1,543 personas. Se halla esta administración a cargo de un cura. El idioma que se habla es kiché; los frutos de este territorio son maíces, frijoles, caña y algunos ganados; las casas están cubiertas de teja, no tan esparcidas como lo están regularmente en todos los pueblos, y los indios tienen lo que han menester, porque tienen muchos trapiches en las cercanías del pueblo, y éstos son de utilidad a los indios. Dice pues el cura en sus respuestas que en cuanto a abusos y escándalos no ha notado cosa alguna en estos pueblos y sólo sí es el vicio más dominante el de la embriaguez y que con los medios que ha tomado, se ha logrado que no sea muy frecuente. Que cuando se pasó a este pueblo del de La Zacualpa echó de menos la escuela recomendada por el rey y arzobispo; pero que no pudiéndola haber, por no tener bienes la comunidad, se sacrificó personalmente a instruir a ocho muchachos y a éstos los ha puesto maestros de veintitrés, que están aprendiendo a leer, escribir y música. Y que no solamente no ha notado idolatrías ni supersticiones, sino que ha reconocido que se afrentan mucho de que les llamen brujos; y es el mayor baldón que para vengarse de ellos se les puede decir, de donde se infiere que sienten mal de estas cosas. Hasta aquí el cura Entre las Reflexiones del prelado se lee:  No es dudable, como he dicho muchas veces en varios lances, que ni ha habido, ni hay, ni ha de haber criaturas más dignas de compasión que los indios; pero ni tampoco con pasión de menos efecto, que la que se usa con éstos y volviendo a reflexionar como propio y característico de esta parroquia es una nueva inventiva, que aparece en ella y tenía notada en otras muchas, a saber: que el cura o con amenazas o con otros arbitrios que ignoro, ganó a los indios para que no dijeran las quejas que tenían, conviniéndose (como es de temer) con ellos que me diría que eran muy devotos, porque yo hacía tales preguntas, que si él no los amparaba tendrían tal vez mucho que sentir.
El fundamento de este temor es que los indios no produjeron contra él cosa alguna; que en los días de la visita estuvo muy oficioso con ellos; que la docilidad tan ponderada es una pura mentira, como convenceré luego; que él me dijo que los indios lo acusarían en muchas cosas, pero que todo era por aversión que le tenían, por obligarlos a vivir bien, habiéndoles permitido el Padre Abendaño que vivieran a su libertad; que su genio es tan díscolo que así lo dicen los religiosos, que maltrata a los indios y tan colérico, que tiene muchas veces en la lengua al demonio. "Voy a convencer lo que prometí: el día antes de marchar me entró con que los indios solamente querían llevar las cargas hasta tal puesto, porque decían que esto era su costumbre. Con el conocimiento que tengo de los indios, y como ni sé, ni puedo mandar que los azoten, le dije: Padre, estos indios no pasarán de  donde dicen; búsqueme arrieros de propósito para concertarlos hasta tal pueblo o puesto. Con esto se salió y estuvo gran rato muy afanado con los indios y volvió diciéndome: ya está todo compuesto. No, Padre, le repliqué. Yo no quiero que vayan estos indios, sino que se me busquen arrieros. Fue tan tenaz en que estaba todo compuesto, que le dije: pues que entren los indios, para que se les pague y se concierte hasta dónde han de llegar. Instó en que no era necesario porque estaban convenidos y muy contentos. Como de cualquier modo yo no los entendía y había de pasar por lo que dijera el cura y tenía q e entender en otras cosas, dije al secretario: vaya a tratar con los indios, porque si no es bien asegurados nos dejarán en el camino. Volvió diciendo: Señor, están bien asegurados. Con todo le repliqué: pues con toda la seguridad nos dejarán en el camino.
"A las tres leguas que salimos del pueblo dimos en una ranchería, en que hay poca gente; pararon los indios, quitaron las cargas y las pusieron en tierra diciendo que ellos no pasaban de allí; como no les entendíamos la lengua, ni podíamos explicarles bien lo concertado, todo era alboroto y gritos. Yo tomé el partido de entrarme a un jacal, diciendo: que se enviara un criado a cualquier pueblo a buscar gentes que nos llevaran las cargas; con esto unos y otros entraban al jacal, persuadiéndome que allí quedaran algunos mozos y que pasara yo adelante, porque si no tendría muy mal día, porque aún faltaban que andar siete leguas y el sol ya mortificaba. Habiéndome puesto firme en la resolución, de que no me movería de allí, comenzaron nuevos esfuerzos hasta que consiguieron que pasarían dos leguas más adelante las cargas, en donde se encontrarían otros indios que las condujeran. Con esto salí del jacal y viendo aún las cargas en tierra dije a los capellanes:
No se cansen porque no me pondré a caballo sin llevar adelante los indios; porque nada fío de ellos. Se comenzaron las instancias, continuaron los indios en sus resistencias, hasta que al fin se determinaron a cargar a fuerza de promesas. Esta es la suavidad y docilidad de los indios obedientes a cualquiera insinuación, como dice el cura en sus respuestas, por lo que es de temer que todas son un ensartamiento de mentiras hechas a convenio de los indios para que no lo acusaran éstos, ni denunciaran si tenía algún exceso. Desde el pueblo de Xoyabah hasta el de San Martín Xilotepeque hay diez leguas rumbo de norte a sur. El camino es pésimo y sumamente molesto . . . En el Compendio de la Historia de la Ciudad de Guatemala, el bachiller sacerdote Domingo Juarros escribió por el año de 1800 que Joyabah era curato dentro del entonces Partido de Sololá con dos pueblos anexos, servido por clérigo secular "que todos son doctrinas de la religión de Santo Domingo. Los indios de este cantón unos hablan la lengua quiché y otros la kachiquel. El temperamento, frutos y comercio son semejantes a los del partido de Totonicapam". Agregó que el curato contaba con dos iglesias, once cofradías, 2,062 feligr eses de habla quiché, un valle y cinco haciendas. Tenía una extensión de 15 leguas y estaba 30 leguas al oeste-noroeste de la actual capital.                                                                                                                                  
Con el nombre de Asunción Joyabaj, perteneciente al curato de Asunción Joyabaj en la Alcaldía Mayor de Sololá, conforme publicado por el Archivo General de Centroamérica, en el "Estado de Curatos del Arzobispado de Guatemala del Real Tribunal y Audiencia de la Contaduria de Cuentas del 8 julio 1806" figura con 390 tributarios; no se indicó en esa fecha el total de habitantes.
Ubicación y Acceso:
Municipio del departamento del Quiché. Municipalidad de 2a. categoría. Con un área aproximada de 304 km 2 y a una atura de 1,433.41 metros sobre el nivel del mar.
En el centro de la cabecera departamental Santa Cruz del Quiché, en el km. 156.67 de la ruta nacional 15 se inicia la ruta departamental Quiché 2. Por la misma 7 km. a Chinique de allí a Zacualpa 22 km. y de esa cabecera a la de Joyabaj 12 km., siempre en dirección al este. También cuenta con caminos, roderas y veredas que unen a sus poblados y propiedades rurales entre sí y con los municipios vecinos.
Colindancias Físicas:
El municipio colinda físicamente con los siguientes municipios.
• al norte con Zacualpa y San Andrés Sajcabajá (Quiché.);
• al este con Cubulco y Granados (Baja Verapaz);
• al sur con SanJuan Sacatepéquez (Guatemala), Tecpán Guatemala, Santa Apolonia, San José Poaquil y San Martín Jilotepeque (Chimaltenango);
• aloeste con Zacualpa, Chiché y Chichicastenango (Quiché).
Coordenadas Geográficas:
El municipio de Joyabaj al centro del parque tiene las siguientes coordenadas geográficas.
• Latitud norte.   14°59’35”,
• Longitud oeste.  90°48’26”.
Geografía:
Se encentra geográficamente en la parte sur este del Departamento y al noroccidente del país.
El municipio cuenta con los siguientes caseríos:
• Aguacate
• El Tablón
• Muchuchén
• Cruz
• Chich
• El Temal
• Ocós
• Sacchum
• Cuxlá
• Estanzuela
• Pachipin
• Tzanabaj
• Chopanxot
• Guachipilín
• Pajopop
• Tzanchura
• Chorraxaj
• Ixoc
• Patio de Bolas
• Tzitzil
• Chosavic
• Ixtelom
• Patunalá
• Tzulá
• Chotaj
• Laguna
• Seca
• Piedras Blancas
• Xeconob
• Chuchucuy
• Las Cruces
• Quiacoj
• Xecruz
• Chuijul
• Las Tres Cruces
• Quisché
• Xenup
• Chuitzaj
• Las Lomas
• Rejillero
• Xecunup
• El Boquerón
• Los Cimientos
• Rio Chiquito
• Xoquiajtej
• El Portugués
• Mixá
• Río El Arco
Las aldeas son:
• Caquil, con los caseríos: Chicotom, Patzán, Tzajmá, Xebalamguac, Pasaguay, Paxtup,  Xeabaj, Xepepén
• Chuaquenuj, con los caseríos: Chijuc, El Pericón,  Sajcuín, Chuxil, Ojo de Agua, Salij, El Infiernito,  Raxanep,  Talaxcoc
• Los Llanos, con los caseríos: La Calera,  Pájaro de Plata
• Pachalib, con los caseríos: Coyoyá,  La Comunidad,  Los Magueyes, El Pericón, La Estancia,  Quiajchaj,  Río Grande
• Pachalum, con el caserío con el caserío: Los Altos
• Palibatz, con el caserío: Tanilar
Parajes:
• Aborrayo Chichop Duraznal Gómez (nombre descriptivo);
• Puente Azucenas Chijomquij Chusiquel sobre el río Grande o Motagua,
• lin-Balxuán Chilotz El Amatillo dero con San Martín Jilotepeque
• Buena Vista Chimusché El Anono (Chimaltenango)
• Casa Blanca Chimuxicán El Ciprés Iquial
• Cerro Alto Chioná El Guachipilín Joya de Las Veguitas
• Cimarrón Choabaj El Jute Lacantún
• Cuslá Chocaquil El Tablón La Comunidad
• Chiaj Chochajbal El Tecomate La Cruz Los Llanos
• Chicotom Cholcumún El Tumbadero Las Moritas
• Chicoxtic Chotuaj El Zapote Las Vegas
• Chicuá Choxlic Encinal Lencuá
• Los Altos Mutuljoj Piedra de Cal Santa Elena
• Los Encuentros Naranjito Piedras de Fuego Sechum
• Los Trapichitos Ojo de Agua Capir Pilá Suchip
• Los Tunales Pachichij Quebrada Grande Toro Seco
• Los Volcancillos Pajuyá Quixché Tucachá
• Maguey Pamux Rincón de Las Niguas Tunajá
• Mixá Panchum Sacchum Tzanquiajuleu
• Mojón Pasojoc San Isidro Tzitzac
• Mucaj Patintá San Juan Los Llanos (antes finca) Xechipup
• Muculiquiá Paxatú San Rafael Las Minas Xemonté                                                                                  
Accidentes Orográficos:
Sierra:
• Chuacús
Montañas:
• Chichaj
• Chichicaste
Cerros:
• Alto
• El Cucurucho
• Las Mulas
• Balamguac (lindero con Cubulco, B. V.) I
• Xtelom Chimachó (lindero con Cubulco, B. V.)
• Ixquinul
• Panchum
Accidentes Hidrográficos:
El municipio en su parte hidrográfica forma parte de la cuenca del río Motagua contando además con ríos, riachuelos y quebradas las cuales se nombran a continuación.
Ríos:
• Arriquín
• Chuatulul
• Pajopop
• Cacuj
• El Anono
• Pasaguay
• Caquil
• El Arco
• Pamutz
• Cocol
• El Tumbadero
• Saltán
• Cocoyá (en parte de su curso se le conoce como Grande o Motagua
• Tunajá (se le conoce también como Temal)
• Las Vegas
• Cuevas
• Las Vegas de Zacualpa
• Tzitzil
• Cusulá Mixá
• Tzulbá
• Chiquito
• Pachichij
• Xebalamguac
Riachuelos:
• El Chorro
• Veguitas de Mercedes

Quebradas:
• Agua Tibia
• El Pericón
• Las Pilas
• Piedra de Cal
• Aguacate
• El Salitre
•  Los Cangrejos
• Pital
• Chiyop
• El Zapote
• Los Magueyes
• Quiacoj de Guachipilín
• Grande
• Motuloj
• Salijde Ocós
• Honda
• Muchuchén
• Santa Rita de Tanilar
• La Estancia
• Pabux del Aguacate
• La Loma
• Patzán
• Secas Demetrio
• La Puerta
•  Panchum
• Suchipup
• El Liberato
• Las Azucenas
• Paxocol
• Talaxcoc
• El Pacayal
• Las Minas
• Paxtuj
• Xepepén
Clima:
El Clima del municipio se puede definir como templado ya que cuenta con los siguientes datos para aseverar lo anterior.
• La biotemperaturas van de los 17°C a los 31°C.
• Precipitación promedio anual de 300 a 800 mm
• Evapotranspiración promedio anual de 1,470 mm
Vegetación Natural:
La vegetación natural, que es típica de la parte central del altiplano, está representada por rodadels de Quercus spp. Asociados generalmente con Pinus pseudostrobus y Pinus montezumae.  Puede observarse además Alnus jorullensis, Ostrya spp. Y Carpinus spp.
Fauna:
Los datos relacionados a la fauna silvestre son bastantes dispersos, pero en la actualidad  a pesar del avance de la frontera agrícola y a la caza sin control de las diferentes especies existentes en el Municipio de Joyabaj, en la  actualidad en  donde todavía existe parte de  bosque se puede encontrar diversidad de animales silvestres de los que se pueden mencionar: El pajuil,  venado, tepezcuintle, armadillo, lobos, tacuazines, peces, entre otros.
Paisaje:
El paisaje del terreno esta determinado por los diferentes factores tales como el tipo de suelo, su conformación, la vegetación, el clima, entre otros.
De este municipio podemos decir que el paisaje lo determina la fisiográfica, la cual es la depresión del Motagua.

Vías de acceso y transporte:
En el centro de la cabecera departamental Santa Cruz del Quiché, en el km. 156.67 de la ruta nacional 15 se inicia la ruta departamental Quiché 2. Por la misma 7 km. a Chinique de allí a Zacualpa 22 km. y de esa cabecera a la de Joyabaj 12 km., siempre en dirección al este. También cuenta con caminos, roderas y veredas que unen a sus poblados y propiedades rurales entre sí y con los municipios vecinos.

Cultura e identidad

El idioma predominante es el K´iché con el  88.6%,  el resto de la población es el Español (INE, 2002). En cuanto a los aspectos deportivos, el municipio de Joyabaj, posee un estadio de fútbol (circulado en buen estado), el cual fue remodelado en los primeros meses del año 2007, tiene capacidad para recibir entre de 1,000 y 1,500 personas aproximadamente en el
graderío.

También en el área urbana, se localizan canchas de baloncesto en los barrios La Democracia, la Libertad y Barrio Central, al igual que en algunos centros educativos de la localidad. Se puede observar que en las áreas rurales se posee la infraestructura adecuada en las comunidades de La Estancia Pachilip, Pachilip Sector I, Pachilip Sector II, San José Chuacorral, Estanzuela, El Temal, Chujalga, El Boquerón, Las Lomas, El Portuguéz, San Antonio La Comunidad, El Pericón Chuacorral I, San Luis La Comunidad, San Isidro, El Infiernito, Chosavic, Los Llanos, Parlaché, San Rafael Xichop, Santa Elena, Piedras Blancas. Canchas de papi futbol privadas ubicadas en el turi centro El Oasis en la misma localidad y otra cancha para el mismo deporte en el Barrio la Libertad, en Las Lomas, Boquerón, Laguna Seca, San Rafael Xichop, El Axiote, Sechum, Xeckichelaj y Chuaquenun. Por lo que debido a la existencia de todos estos polideportivos, se realizan a lo largo de todo el año varios campeonatos entre las distintas comunidades.





Costumbres y tradiciones

En el Municipio sobresalen las creencias y prácticas religiosas ancestrales mayas que tienen conexiones prehispánicas. Se distinguen las raíces culturales, el folklore que es apreciado por turistas nacionales y extranjeros, el colorido de los trajes típicos es muy singular. Las tradiciones han acompañado desde siglos atrás, las cuales caracterizan a cada Municipio como único, en donde se respeta y aprecia la multiculturalidad como una gran riqueza. La población indígena domina los idiomas Quiché y Kakchiquel.

El traje típico que visten las mujeres del Municipio consta de dos tipos: el de gala es un corte de color negro con bordados de colores en medio, un güipil de color negro con bordado de hilos de colores o dorados, tejidos a mano y un mecapal de diversos diseños y coloridos. Se utiliza en la cintura para sostener el corte. En el cabello utilizan un pañuelo de varios colores, los más utilizados son el rojo y el celeste. El traje ordinario consta de un corte de colores, con un mecapal rojo, güipil de color rojo con diseño de flores y un pañuelo de bolitas de varios colores que usan en el cabello.






El traje típico de los hombres también consta de dos tipos: el de gala es una camisa y un pantalón color blanco, con un mecapal de color rojo, un delantal de color oscuro y una chaqueta de color rojo con bordados negros. El traje de diario consta de una camisa y un pantalón de color blanco, un delantal color oscuro, un mecapal de color rojo y un cotón de color negro.


Las tradiciones y costumbres son enmarcadas por las cofradías, de la siguiente manera: la Virgen del Tránsito, Corpus Christi, Virgen del Rosario, Santa Cruz, Jesús de Nazareno, San Marcos y la de San Juan Apóstol.



Fiesta patronal

La fiesta titular del municipio se celebra cada año en honor a la inmaculada Virgen del Tránsito, del 8 al 15 de agosto. Durante este festejo se llevan a cabo una serie de danzas tradicionales, entre ellas: Baile del torito, Baile de la Conquista, Baile de la Culebra, Baile del Venado, Baile del Palo Volador o San Miguelito, Baile del Convite y Baile de Mexicanos, los Currunes, Kmon Ek, los Moros, la Conquista y los Coheteros, entre otros.














 Entre otros festejos se encuentra el día de Concepción para el 7 y 8 de diciembre, donde se realiza tradicional convite de hombres, alborada, quema de castillo y juegos pirotécnicos.

Lugares Sagrados

Existen lugares sagrados los cuales son Cruz Chich, Cerro Cumatz, Estanzuela, Xecnup y Pinajchu Chorraxaj, en estos lugares se realizan ceremonias las cuales sirven para comunicarse con el ser supremo.




 Transportes Xoyitas






Platillos Típicos